For all the Saints!

11-01-2020Weekly ReflectionFr. John Sims Baker

The name of everyone in heaven begins with "S" for saint! That's right, there are nothing but saints in heaven, and you have to be one before you get in! So we had better get to work. Or rather we had better let God work on us because we will never do it on our own. If you die before you are a saint, then that's what purgatory is for, but I would rather go straight to heaven. Wouldn't you?

Even among Catholics, you sometimes run across the sentimental idea that everyone who dies goes straight to heaven. But "going to heaven" is not a trip with a destination. It is a way of being being a saint, that is. You can't fake being a saint! Either you love God with all your heart, soul, and mind or you don't. Our hearts, minds, and souls have to be filled with the love of God that is given to us by the Holy Spirit.

Once you are a saint, you will probably have November 1, All Saints Day, as your feast day, unless you are lucky and holy enough to be canonized and get your own day. Now that's a great ambition! 

Faithfully, 

Fr. Baker

¡Por todos los santos!

El nombre de todos en el cielo comienza con "S" ¡de Santo! Así es, no hay nada más que santos en el cielo, ¡y tienes que ser uno antes de entrar! Así que será mejor que pongamos manos a la obra. O más bien, es mejor que dejemos que Dios trabaje en nosotros porque nunca lo haremos por nuestra cuenta. Si mueres antes de ser santo, para eso está el purgatorio, pero prefiero ir directo al cielo. ¿No lo prefieres así tú?

Incluso entre los católicos, a veces nos encontramos con la idea sentimental de que todo el que muere va directo al cielo. Pero "ir al cielo" no es un viaje con destino. Es una forma de ser, es decir, de ser santo. ¡No puedes fingir ser un santo! O amas a Dios con todo tu corazón, alma y mente, o no. Nuestros corazones, mentes y almas deben estar llenos del amor de Dios que nos es dado por el Espíritu Santo.

Una vez que seas santo, probablemente tendrás el 1 de noviembre, el Día de Todos los Santos, como tu fiesta, a menos que tengas la suerte, y la santidad, de ser canonizado y tener tu propio día. ¡Esa es una gran ambición!

Fielmente,

 El p. Baker

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